Fraude, no defraudes

La herniada columna vertebral del agónico duhaldismo cruje con cada movimiento.

  

1) El uatrero Gerónimo “Momo” Venegas se hizo cargo de ilustrar a la gente dando su personalísimo “análisis estadístico” por AM 710 en “Edición Extra” con Luis Novaresio: “Más bien que hubo fraude. Acá votó el 78% del padrón, de ese 78% hubo un 10% de Voto en Blanco y del otro 68%, la Presidenta se llevó el 50% de los votos, o sea que si analizamos tiene el 34% del padrón General… pero, además, si hay números erróneos, a lo mejor en vez de tener el 34 tiene lo que tuvo en Santa Fe, lo que tuvo en Capital… que eran 30 o 32 puntos.”

Es una verdad a medias, porque si emitió su voto el 77,8% del Total de ciudadanos inscriptos, y, aproximadamente apenas un 4,8% de ellos lo hizo en blanco o su identidad fue impugnada o su sufragio fue considerado nulo o recurrido (no el 10% que alega el sindicalista rural), significa que al 50,2% del Total Emitido y Válido oficializado por la Justicia Electoral para la fórmula Fernández-Boudou le corresponde un 39,1% de los Votos Emitidos según el Padrón y un 40,6% de este Total relativo a los Votos Válidos. O sea, ni recurriendo a ese artificio propicio para confundir a ciudadanos sin la menor idea de Cómputos Electorales, ese 34% asignado fue veraz.

O una verdad a cuartos, o sea a medias de medias, acaso, ¿el representante de los esclavizados peones y estibadores rurales puede reclamar algo a quienes cosecharon con otros braceros esos 30, 32 o 34 puntos que intentó dibujar plantado en los supuestos 12 o 20 que decían haber sesgado con hoz y guadaña?

Peor aún, resulta una verdad a octavos ya que no se trata de interpretaciones sino de hechos, de numeritos que siguen leyes universales. Sin embargo Venegas no aclaró que según ese arbitrario criterio cortado al bies, ningún otro candidato llegó siquiera a los dos dígitos porcentuales: Duhalde obtuvo el ínfimo 9,43% y 9,79% proporcionales respectivos y el hijo de Alfonsín, el 9,49% y 9,86%. “Más bien que hubo fraude”...

   

2) Lo de Jr. Jr., el hijo sosías de Federico Pinedo, aquel ideológo del entregador Pacto Roca-Runciman y autor del retrógrado Plan Pinedo, aunque previsible dada su estirpe de traidores, no deja de asombrar.

Para las PASO, en tanto Macri se iba de vacaciones a Francia e Italia desentendiéndose de sus acólitos lanzados como candidatos, Gabriela Michetti persuadía a sus seguidores para que votasen a Alfonsín y González Fraga, al tiempo que Pinedo manifestaba su respaldo a Duhalde y Das Neves. Ningún alto o medio dirigente del PRO había expresado apoyo a Binner y hasta censuraron a su partido vecinal fueguino cuando publicaron su respaldo al Frente para la Victoria.

Sin embargo, luego del atroz revés del 14 de agosto, el mismísimo Pinedo Jr. Jr. fue uno de los principales promotores de la bajada de las candidaturas de las lejanas segundas fuerzas, para fomentar el apoyo a la cuarta: el FAP de Hermes Binner. Convicciones claras, bases doctrinarias y trabajo a largo plazo que le dicen. Eso sí es PRO.

   

3) Uso distinta lente que el compañero Jorge Asís, pero no por enfocar diferente me desagrada leerlo, ya sea por la graciosa chicana sutil, la sarcástica crítica impiadosa, la sofística contradicción, la irreverente provocación entre burda y sagaz o el carácter axiomático con estilo simposio impreso a sus análisis de coyunturas.

Y para nada voy a descalificarlo por su menemduhaldismo -flotante pero no de corcho- como acostumbra hacer la troupe gvirtzsista autoinmune a cualquier expresión del peronismo exceptuando la actual y oficial, claro, sino que trataré de interpretar su mirada para sumarla a la que pueda tener yo durante el trancurrir de estos apuntes sobre la quincena posterior a las Elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias.

Copio algunos tweets de la previa amansadora, que deben leerse de abajo hacia arriba:

Es decir, “los seguros de derrotar a Cristina” eran Duhalde y Alfonsín que armarían un “gabinete de coalición”. Sobre los nombres vertidos, huelgan comentarios, pero vale conocer la previa para evaluar la posterior al duro golpe sufrido por ambas agrupaciones rezagadas a la cuarta parte del caudal electoral que aprueba a la actual gestión presidencial.

La noche del 14 a Reina Viva y reina puesta, hizo un clic de contacto con el inocultable escenario:

Sutílisimo el amigote de la aclamada ensayista Serenella Cottani. Y breve aunque crudo, casi vivo.

    

4) A las ridículas tramoyas mediáticas de la Superiora Chiche Duhalde, Mano de Piedra Caamaño y otros grandes valores del Frente Popular, mejor no tocarlas ni tangencialmente porque el posteo se me iría de dimensión. De tamaño, de órbita y de magnitudes temporoespaciales, digamos.

  

  

La reacción inmediata al knock out, no fue el abandono.

  

Por parafrasear a Eduardo Alberto Duhalde cuando hace unos meses fogoneaba al MPA (Movimiento Productivo Argentino), el reflejo del púgil derribado en estado de shock, no fue cerrar la guardia ni contragolpear en el ring ni siquiera convocar a sus fibras internas, sino colgarse de las cuerdas cacareando hacia el otro rincón.

La gallinácea respuesta instintiva fue acusar de fraude a la Dirección Nacional Electoral (DiNE) del Ministerio del Interior. Sí, aún cuadruplicados en votos y reducidos a uno de cada ocho electores no buscaron respuestas adentro ni alzaron la vista hacia la gente. Tampoco abandonaron, al menos hasta el momento aunque faltan cincuenta días que cuentan... En ring y banquillo, sólo levantaron estridentes cacareos que hicieron eco en múltiples medios de comunicación, los mismos medios que durante tres años -para ellos fugaces- los encapsularon herméticamente de la realidad y ahora les rezongan acusándolos de haber sido vapuleados debido a sus incapacidades y egoísmos. Vale recordar que muy pocos dirigentes de la oposición interpretaron la opereta del fraude y contadísimos periodistas osaron opinar asintiendo a las pueriles denuncias infundadas y, por tanto, inadmisibles.

  

Otra lectura de trasnoche -en todo sentido- efectuó Eduardo Amadeo, que paradójicamente también debe leerse de modo ascendente. Lo del perdidoso precandidato a gobernador de la Provincia de Buenos Aires fue lamentable:

Ya sea devolviendo tweets de otros o escribiendo el propio o en declaraciones radiales y tanto las inferencias como los diagnósticos incluyendo elementales operaciones aritméticas, exhibieron el más obtuso criterio y el ángulo más agudo -en sentido geométrico- para una perspectiva estrecha y de bajo alcance.

¿Más de la mitad? La tendencia de que Cristina Fernández de Kirchner había superado el 50% de los votos emitidos permaneció invariable a partir de los primeros telegramas cargados por la DiNE.

¿Verlo segundo a su candidato presidencial pero a cuatro vueltas de diferencia amerita celebrar? Sólo para la exigua caterva que creyó que el segundo captaría los votos del resto el 23 de octubre, como si fuera posible que un coherente elector de Binner, Argumedo, Altamira o Carrió, podría optar por Duhalde… Ni en el improbabílisimo caso de balotaje lo harían, a excepción de especímenes inclasificables e incalificables como Patricia Bullrich.

Me resulta tedioso escrutar las opiniones del economista de la Universidad Católica Argentina (UCA), pero nuevamente connotó un inaudito significante con el patético festejo por quedar lejísimos de Scioli y detrás de De Narváez. O repetir a la hija de José Ignacio Rucci diciendo que los resultados “marcan el techo del Kirchnerismo (con mayúsculas textuales) y el piso de la oposición (sic minúsculas)”, sin considerar al techo monolítico y en la cuarta planta, mientras que el piso a nivel de suelo incluye mosaicos, mortero, zócalos y contrapiso de pendiente… O declarar en el programa de Rial que “falta mucho para octubre y Cristina aún puede cometer más errores”, sin advertir que el pueblo ya evaluó errores y aciertos expresando contundentemente que los vicios no son tales o que pierden relevancia comparados a las virtudes del modelo de gestión.

   

Sin embargo, a dos días de los resultados, el letrado diplomático Jorge Asís mejoró la percepción intramuros. O, ante la victoria indiscutible y avasallante del oficialismo, tomó coraje como para escribir lo que pudo haber supuesto previamente:

Duro juicio el del autor de “El kirchnerismo póstumo”. ¡Bah!, a decir verdad, pasados tres días de las elecciones, es válido no obstante tampoco desgranó nada demasiado intrincado.

  

En tanto, el ex Presidente del BaPro durante la gobernación de Antonio Cafiero (1987-91), afinaba los números aunque no el sentido:

Basta ver la aprobación del tweet de la Radio UBA y su proclama mediática, reenviado a la red por él mismo y dos más: eso es respaldo en soledad… Si bien soy disperso y premeditadamente redundante, sobran acotaciones.

   

A tres días de las PASO, Jorge Cayetano Zaín Asís ya apuntó directo al indigesto devoramiento de sesos de cierta prensa corporativa y rozó al remozado Plan “D” del Grupo “A”: la opereta de la Boleta Única.

Clarísimo aporte de sales para la reanimación el que hizo el compinche de Oberdán Rocamora desde el rincón: ¿un diputadito más, un papel menos indigno o la quimera de ganar?

Luego del golpe de knock out del poderoso Crucero de mucha mayor talla y peso que el correspondiente a la categoría Mínima o Paja, el liviano empezó a desaturdirse y le sacaron el bluff de la Boleta Única del botiquín, casi como una toalla lanzada desde el banquillo para terminar el combate.

Y sí, a esta altura de las preliminares, parece que la papeleta del FpV quedará sola en el ring del cuarto oscuro…

  

  

Y tras el gong, Amadeo subió al ring aún aturdido y sin que le tiren el trapo.
    

A diez días del demoledor uppercut de izquierda, el provisorio Vicejefe del Gabinete de Ministros del 2002, invitaba a sumarse a la campaña: “Hacete militante virtual – Amadeo Gobernador / Duhalde presidente”.

Un reflejo, si bien vano y de inexorable disipación, demostrando cierta valoración a la comunicación no corporativa y un atisbo de actitud para recuperarse. Pero fue el único.

Inmediatamente, el consuetudinario pupilo de Kid Tachuela retomó la desacertada táctica tal si buscara que lo masacren peleando a distancia contra un rival Crucero siendo Paja. Amadeo que no es Gatica, se prendió de una declaración de Manuel Blanco, publicada por el diario “La Nación”, pero con una interpretación sesgada de las afirmaciones del Juez Federal con competencia electoral en la Provincia de Buenos Aires, quien había expresado: “Hubo más errores que lo habitual… (Afectaron) incluso a la fuerza cuya cabeza visible es la Presidenta de la República.” Evidentemente muy malintencionado o neófito en los reglamentados procedimientos comiciales, tampoco interpretó correctamente la conclusión de Blanco: “El único escrutinio válido es el de la Justicia Electoral. El que realiza el Ministerio del Interior es provisorio y no tiene ninguna validez” y, a los pocos días, desbarrancó.

  

Prácticamente sincronizando, el Jefe de Carolina Mantegari enfocaba desde otro punto con mayor visión periférica y en solidaridad con los tres o cuatro gimnasios de boxeadores para preliminares. Ni para semifondo, ponele.

   

A más de diez días de andar de PASO, Amadeo -que no es Carrizo- se fue a la banquina contra el escarpado talud de la necia exposición insustancial:

Otra vez en soledad. La mitad de los retweets generados -entre ellos, el que le dediqué- fueron para gastarlo.

Se advierte casi como una presión esa postura de citar al Juez para asegurar que estaban “segundos cómodos en la General y en la Provincia”. Y, sin dudas, ante todas las ciertas certezas descriptas, andar de lobbie en los medios para confirmarlo Juez Electoral de por medio, es una siniestra maniobra de confusión a la opinión pública. De hecho, tal lo previsto, quedaron terceros en la presidencial y la bonaerense.

   

Dos días después, Amadeo -que no es Carrizo- permanecía en la burbuja del crecimiento del conteo definitivo y como columnista estrella de “La Nación”:

El genio de las finanzas bancarias no parece serlo de la contabilidad más elemental. Si en el Escrutinio Provisorio de la Dirección Nacional Electoral se habían computado los telegramas correspondientes al 96,8% del Padrón Nacional, es obvio que todas las Listas aumentarían el caudal de votos, excepto que no obtuviesen ninguno en las 1.800 Mesas faltantes o que los errores primarios en exceso se compensaran con los logrados en esas Mesas incluidas en el Escrutinio Definitivo de la Justicia Electoral Actas en mano…

De no creer lo que afirman sin rubores ciertos referentes del mayor Distrito del País. Casi tan ridículo como lo del Momo y Chiche. Casi como decir: “Si compro dos cajas de bombones surtidos voy a tener más de praliné que si compro una caja”; y sí, ya sería demasiada mala trufa que fueran todos de leche, fruta y chocolate, ponele.

Para colmo de males para esa falange neoliberal, panclerical y filocastrense, no creció: Duhalde sumó votos como el resto, pero su porcentaje relativo decayó del 12,16 al 12,12%, en tanto el de Alfonsín incrementó de 12,17 a 12,20% agrietando la leve fisurita que los separaba y no invistiendo a ninguno como indiscutible heredero del Voto Anti “K”. La peor combinación: perdedores, lejos y virtualmente empardados.

  

Triste rol el de presentar denuncias judiciales contra seis Presidentes de Mesa por presuntas irregularidades en la confección de telegramas para el Escrutinio Provisorio. Alguien con trufa rancia podría pensar que Amadeo procedió como el Viejo Vizcacha: ya que no consigue colaboradores para fiscalizar a su Partido, escupe el prestigio de todos y desanima a los ciudadanos que participan como Fiscales de otras agrupaciones procurando que los guarismos de los comicios expresen la legítima voluntad del pueblo y, además, conspira contra el compromiso y la tranquilidad de las Autoridades designadas por la Justicia Electoral.

   

   

El piloto de tormentas se resfrió por no usar galochas Pampero.

  

Quince días de PASO y Eduardo -que no es Duhalde- volanteó con un irresponsable mensaje reaccionario:

  
Entonces, Eduardo -que no es Duhalde, el bueno ni el malo-, desbarrancó hacia el abismo más profundo, bloqueando a este humilde ocasional usuario del Twitter:

Vale decir que, consecuente con su carrera artística y su performance político-económica, el precandidato no fue el primero ni ahí. Perdón, según su perfil, el “Futuro Gobernador de la Provincia de Buenos Aires” no fue pionero. Tiempo atrás, muchos célebres republicanos ya habían intentado bloquearme la lectura de sus tweets: Ricardito Alfonsín, Esteban Bullrich, Federico Pinedo, Patricia Bullrich, Carlos Pirovano, Jorgito Macri, Mariana Lestelle y Pablito Das Neves; asimismo, Nito Artaza, Alfredo Casero, Miguel Torres Del Sel y Pablo Sirvén, entre algunos personajes de la farándula; además de Maximiliano Montenegro, Gaby Levinas (Caddy Dextrinas), Julia Mengolini y otros comprometidos comunicadores, como el propio canal TN Todo Noticias (Tergiversación Negociante).

Un popurrí ideológico, espero. En realidad, que existan demasiadas semejanzas me resultaría verdaderamente deprimente, observando los perfiles que caracterizan a la generalidad. Hay varios que son i-rre-cu-pe-ra-bles. Otros, apenas confundidos.

  

  

El piloto de Fórmula F-3 o F-4, con Rucci, derrapó en la chicana de Ascari.

  

Ahora que varios están pidiendo pista en el Frente para la Victoria, vale preguntarse si Eduardo Amadeo está confundido o es irrecuperable, ¿es un hombre de don Antonio Cafiero o de Tachuela Duhalde?, ¿es de la vieja renovación o del peronismo democristiano lanussista ortodoxo?

La cuestión es que la fórmula de Amadeo con la hija de J. I. Joe Rucci, obtuvo menos que el 9% de apoyo para la gobernación de la Provincia de Buenos Aires, contra más del 50% de Scioli-Mariotto y un 17% de De Narváez-López. Entrada la noche del lunes, pude interpretar la algarabía que sintió el candidato por el lejano tercer puesto, al haber superado a Sabbatella, Stolbizer, Rodríguez Saá y Morán.

Y en los días posteriores, también con una mirada piadosa, pude comprender la angustia del comicialmente económico economista Amadeo, y, hasta corresponde aceptar de buen grado el bloqueo a este simple chaqueño con sangre capitalina y conurbana en sus venas. Y en sus arterias. Y no lo hago para mofarme: escribo en tercera persona de puro chaco-tero que soy (?).

Realmente, hoy, estoy compungido por no haberme puesto en el lugar de alguien que había sido recientemente humillado por el pueblo de su provincia y que acababa de ser atropellado por la realidad, tras la sabida permanencia prolongada en una aséptica burbuja que inexorablemente le bajó las defensas. Y se enfermó.

Sinceramente, me arrepiento desde lo más escatológico de mis entrañas por haber pretendido abusar de tan lamentable situación de debilidad y confusión. Estos tweets posteriores al bloqueo estuvieron mal, muy mal:

A quien viene derrapando no hay que tirarle aceite en la pista. Para eso están los conspiradores del Grupete “A”, quienes en las penumbras y con reflectores siembran clavos miguelitos en la ruta por la que avanza la potente máquina que conduce Cristina. No la máquina de Amadeo. Ni la de Carrizo que no es Eduardo ni la de Moreno que no es el poronga ni la de Loustau que no es Lousteau…

Bueno, está bien, reconozco, yo me bandeé en la chicana. Listo. Voy a la cartuja a autoflagelarme un ratito y sigo.

…

Listo, sigo.

  

   

Pequeña Guía de Twitter Ilustrada:

  

En definitiva, para inexpertos: ¿En qué consiste el bloqueo?

  

Tres corolarios:

El primero, que puede entrarse al Time Line de otro usuario y recorrerlo tantas veces como se desee, a pesar de haber sido aplicado el blocked, si bien dificulta verlo sin esfuerzo por lo que muchas veces logra el objetivo, en tanto para el bloqueado no sea menester perder tiempo para leer lo que publica el bloqueador.

El segundo, que los de easy fast blockers se desvelan por presentar una falsa imagen de aprobación eliminando justamente eso, que quien entra al Time Line vea más refutaciones argumentadas o burdas gastadas que mensajes de concordia, apoyo u obsecuencia.

Y el tercero, que tal postura puede conjeturarse como adoptada por importantes personajes que descalifican o no les interesa leer a un Adrián Pere-Jil Lavedra cualquiera chicaneándolos, o, que no toleran otra mirada ni un cuestionamiento, sea jocoso o no lo fuese.

Hay que relajarse, es saludable coger cada tanto, ponele. La abstinencia cariñosa conlleva al malhumor intolerante, al codicioso aislamiento y a la triste insatisfacción, entonces no lleva a nada realmente positivo ni grato. Parezco un patético combo de Stamateas, Domínguez, Rolón y Coelho. Prometo no dispersarme más con estas cuestiones…

   

   

Redondeando la redonda con Amadeo, que no es Carrizo.

  

Como esta tardecita creo que salgo para Tecnópolis, voy a ir redondeando con dos detalles, si vale la paradoja. Aviso a quienes no me ubican que estoy a unos 1.187 kms. de la feria…

  

Un detalle: aún bloqueado se lee el Time Line del fallido obstructor.

Nótese, amigas y amigos, que la captura de pantalla demuestra la visualización desde mi Cuenta de Usuario. Arriba puede observarse mi bellísimo daguerrotipo de Perfil junto al nombre. Es decir, si no recorro el Time Line del muletto de Mano de Piedra, sencillamente es porque no me despierta interés.

En fin… Es la 1 del mediodía, pasaron un par de jornadas desde el bloqueo tuitero y, sin embargo, “ahora vamos” y “estamos de pie”…

Pero: ¿A dónde van? ¿Cuándo se sentaron o arrodillaron o los acostaron?... ¿A la campañita se las hace el Oso hormiguero? ¿Los eslóganes los proponen desde Comunicación Social de la UCA? ¿Al diseño gráfico lo efectuó Isador Friz Freleng o Hawley Pratt? ¿A los anuncios los musicalizó Henry Mancini?... Una pena que me haya bloqueado el contador que no cuenta: me interesan sus respuestas.

    

Aviso a quienes no me ubican que estoy a unos 1.187 kms. de la feria… Encima, ahora dudo cuál camino seguir: Rutas 16, 12 y Panamericana o 16, 11, 9 y Acceso Norte, ¡porque ganamos en todas partes!

  
¿No los dejan? ¿Quiénes? Ud. que es rapidito para las denuncias: ¡denuncie, contador, denuncie! ¡Diga quiénes les atan las manos!

Y contaron hasta el último, Amadeo, contaron todos. ¿Qué talco?: ¿Veritas?

¡Renuncie, contador, renuncie!

   

Otro detalle: Aún bloqueado pueden retwittearse sus menciones. Y contestarlas arrobándolo aunque no lo lea. Tampoco voy a agredir o blasfemar sin posibilidades claras a réplicas, es que uno tiene menos avidez por el monólogo que ciertas terceras personas. Adán De Ucea conoce acerca de códigos contravencionales y los respeta, señores y señoras. Él, a veces, es una tercera persona, pero otra, no aquella, ponele.

   
A esta altura, Oberdán, el socio de Jorge Cayetano, contaba que con eso de las “recursivas denuncias de fraude”, un compañero del mismísimo MPA les había anunciado: “Déjense de joder, se les van a cagar de risa. Nunca se vuelve del ridículo”, en el artículo: “Fraudes, rencores y acuerdos”. Y no se vuelve: tiene sólo boleto de ida.
    
Y como no hay dos sin tres...

El tercer detalle surgió aleatoriamente al leer los deplorables tweets de Eduardo Amadeo. Hay que ser una persona detestable para aprovechar la desgracia de la pequeña Candela Rodríguez revoleando la media embadurnada con excremento en contra del Gobernador de Buenos Aires, de las Fuerzas Policiales, del Servicio Penitenciario, de la Justicia… Decadente, Amadeo, revulsivo.